A Parker Laird le
encantaban el dinero, los negocios y el poder, en ese orden. A su hermano Jay
le encantaban las mujeres, rubias, morenas, pelirrojas... ¡y no necesariamente
en ese orden ni en ningún otro! Cada semana parecía profesar su eterna devoción
a una chica distinta. Pero, en esa ocasión, Jay se había enamorado de la
secretaria de Parker, Abby. Abby era simpática y eficiente, ¡y tenía unas
piernas estupendas! Parker estaba dispuesto a cualquier cosa con tal de que Jay
se concentrara en los negocios y que su secretaria se quedara en la oficina... ¡incluso
a casarse con ella!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Encuentra lo que buscas
Entradas populares
-
Entre ambos seguía habiendo secretos por resolver... Hizo falta un devastador terremoto para que el multimillonario Cesare di Goia se die...
-
Dan Frazier, un importante ejecutivo, estaba muy ocupado con sus cinco hijos. Compaginar su trabajo con cambiar pañales le estaba pasando ...
-
Amanda Stevens Argumento: Angel Lowell sabía que Drew Maitland nunca podría ser suyo. Su propia hermana, Aiden, se lo había arrebatado...
-
La mujer embarazada que J.T. Ryker tenía delante no recordaba su nombre, ni quien era el padre de su futuro hijo. Pero Gina Banning era...
-
Después de doce años de matrimonio, Sally no confiaba demasiado en que su marido, el doctor Sam Alexander, recordara su treinta y nueve c...
-
Julia Wentworth tiene a todo Londres a sus pies. La bella y encantadora actriz es la niña mimada del mundo teatral; sólo le basta con p...
-
La traición los separó Amelia Greystone estaba enamorada del conde de St. Just, pero él rompió su noviazgo y se marchó repentinamente...
-
"Angélica se ha fugado con Stelvio. Y cuando su aventura termine yo quiero estar casado. Seré el marido de su hermana... tu marido&q...
-
El escándalo había estallado pese a todos sus esfuerzos… Mary Duvall había regresado a Eastwick a reclamar su herencia… no a retomar su...
No hay comentarios:
Publicar un comentario