J.D. MacLean tenía una hija pequeña, y no podía prestarle atención a la
mujer a quien amaba, una joven inmadura incapaz de soportar los problemas que
lo rodeaban.
Sintiéndose rechazada, Katherine se casó con otro hombre. Cuando se
encontraron de nuevo, ella ya no era la mujer impulsiva y él ya era un hombre
rico, acostumbrado a conseguir lo que deseaba…
gracias se viene conmigo!!
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